Preguntar la misma pregunta. Cinco minutos percutivos frente a una extraña. Escuchar. Escuchar preguntar: "¿Tú cómo sufres?" Sentir la pregunta. Como en los Koan Zen la apertura está en la acción de preguntar y mantenerse abierto. Interrelación con la duda, con la inquitetud, con el no sé. No esperar una respuesta, admitir muchas respuestas, dejarse exasperar por la no-respuesta o por cuánto puedes dejar que te llegue o hunda una pregunta. Preguntar es encontrar-se dónde preguntar. ¿Un reto en la presencialidad trastocada en tiempos de pandemia?

.

Una persona frente a otra. Pregunta lo mismo durante cinco minutos. Pregunta de manera rítmica, no mecánica y escucha. La otra persona responde como quiere. Reacciona a la recurrencia, repetición, monotonía de la pregunta; a la tensión o elasticidad de cómo percibe esos cinco minutos. Las dos personas hacen contacto visual. La que pregunta sólo pregunta y escucha. La que responde sólo responde. No se trenza un diálogo conversacional. Después de cinco minutos se intercambian los roles: pregunta el que respondía; comparte el que preguntaba. Un tercero aparte se encarga de tomar el tiempo para no romper la conexión entre estas dos personas.

.

El día que se llevó a cabo la acción ninguno de los participantes quiso invertir el rol después.

.

Este es un breve registro de la acción que se llevó a cabo en Obra Negra, como parte de la clausura de Bruma Laboratoria 2021. La toma fija la hizo Eréndira Gómez @un_galgo_ciego y la edición para este sitio, es de Iván Méjía @koffermejia La acción es parte de uno de los trabajos que realizamos durante el taller "Contemplar la metáfora" con Yessica Díaz @_yessica_diaz  Muchos de los conceptos me fueron muy valiosos, así como lo que generó entre mis compañeras, pero particularmente la lectura de CONTAR ES ESCUCHAR, de Úrsula K. Leguin, que propuso, Yessica detonó varias cosas y me ayudó a digerir en una acción compartida parte de mis procesos personales.